El intendente Gustavo Bevilacqua confirmó hoy su voluntad de analizar un cambio sustancial en el servicio de agua, ante lo que entiende como una falta de voluntad de la empresa Aguas Bonaerenses SA (ABSA) de realizar las inversiones necesarias para permitir un desarrollo positivo de la prestación en la ciudad.
"No podemos esperar diez años a que la empresa reaccione y ver cómo se cae la ciudad", dijo el intendente, que cuestionó el aumento del 180% en las tarifas que regirá desde junio. Afirmó que esta suba no se condice con la calidad del servicio ni con el ritmo de obras necesario para mejorar la prestación.
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